En la entrada del Mediterráneo, Gibraltar es famoso por el Peñón, una impresionante formación de piedra caliza. Desde la cima, accesible en teleférico, se disfrutan vistas extraordinarias, además de la presencia de los simpáticos macacos de Berbería. En la bahía es habitual ver delfines. Sus calles mezclan influencias británicas y españolas, creando un ambiente muy singular.